Cientos de ciudadanos mexicanos buscaron refugio en ciudades fronterizas con Guatemala debido a la violencia en el estado de Chiapas, provocada por enfrentamientos entre cárteles de la droga.
En un video, Juan Francisco Méndez, concejal del pueblo guatemalteco de Cuilco, en la frontera con México, menciona que alrededor de 600 mexicanos han salido de la rivalidad entre el cartel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y Sinaloa.
Aunque no hay cifras oficiales sobre el número de refugiados, el presidente guatemalteco, Bernardo Arévalo, menciona 580 personas, mientras que el presidente mexicano, Manuel López Obrador, estima entre 300 y 500.
La disputa entre los cárteles por el control de las rutas de tráfico de migrantes, drogas y armas ha desencadenado una crisis humanitaria en la región. La violencia ha provocado desplazamientos forzados y situaciones extremas para los residentes locales.
Las autoridades mexicanas y guatemaltecas están trabajando juntas para ofrecer refugio y apoyo a estas familias afectadas. Sin embargo, la situación sigue siendo delicada, con altos niveles de violencia y desplazamientos en la región fronteriza.