Antes de actuar, Ibai Gómez fue empresario. Hace 34 años y hace 21 años, lideraste a los chavales. “Tienes ganas de tarde, hasta el día 17, no pegué el estirón”, presenta el exfutbolista bilbaíno de Athletic y Alavés. “Mi edad me daba una gran diferencia física y los finos de la semana rara vez participaban en fiestas. Como siempre había acompañado a mi padre (padre en euskera), que había sido emprendedor toda su vida, con 13 años me pidió coliderar un equipo de corredores de cinco años. Enseño conceptos básicos y lo disfruto. 13 años después, hasta el día 26, cerré con el Alavés», supimos. Esta primera vez en Vitoria siguieron yendo allí y viniendo todas las tardes a Bilbao para seguir con sus hijas, pero en la segunda el tiempo se había vuelto mucho Más complicado lo encontré hasta que cumplió un año y medio colgó las botas y recuperó la pizarra “Siempre tuve claro que quería se técnico al terminar como jugador”, explica al otro lado del teléfono.
Lo que no espero es que, a unos meses de resetear su vida en los banquillos, pase tiempo completo frente a una selección en un partido. Es el preparador del combinado dominicano, segundo rival de España. durante el torneo (15.00 horas), que en la primera jornada venció a Egipto (0-0). “Hubo más positivo que negativo. Marcamos, pero no hay cancelación por arbitraje. A ver si podemos competir. Sabemos que es otro nivel”, analiza el cuenca, que llegó en el último momento sin Júnior Firpo porque el Leeds no tenía el permiso y cuenta con el canterano madridista Peter Federico, nuevo jugador del Getafe, como futbolista del más cartel. También es al extremo que Óscar Ureña llegó con cierto éxito en el camino a Leganés desde Girona. La lista de antiguos alumnos, sobre todo, jóvenes de varios filiales españoles (Leganés, Osasuna, Elche y Alavés), modestas canteras europeas (Volendam, Ingolstadt y Union Saint-Guillois) y algunos de La Liga local.
Al mismo tiempo, el gusto de los equipos es “alegres, valientes, valientes, ordenados y protagonistas en el campo rival”. Así tuvo que pasar en algún momento la Federación del Caribe entre los jóvenes del Santutxu, el primero a la vez que su intención de anunciar su retirada como futbolista en 2023. A mediados de año organizarán su nueva vida, Un día de diciembre, dos representantes del país. Ataca al club bilbaíno, donde también es presidente del padre del exjugador (Mitxelo), y se compromete a hacerlo. “Conocía entre poco y nada en el fútbol dominicano. Pero analizamos a más de dos jugadores, algunos de ellos con doble nacionalidad, y sabemos que tenemos capacidad y que podemos llevar», visto el gran salto que ha dado.
Dirigido desde los 13 años, aunque el principio era que los niños eran muy pequeños, la mente de Ibai Gómez en sus 193 encuentros con el Athletic y los 92 con el Alavés sólo pensaba en él en solitario como jugador. De todos nuestros contratistas, fueron capaces, estuvieron retenidos en casa de Marcelo Bielsa, incluso, al concluir sus dos campañas en San Mamés.
“Es una forma muy diferente de emprendimiento que llama mi atención. Creo que hay asociaciones entre dos o tres jugadores en una zona del campo, esa ocupación del espacio, ese ser buscado para ocupar, las marcas en profundidad y en apoyo, el encuentro con el hombre libre… Luego del resto también Ido cogiendo conceptos. De Marcelino y Ernesto (Valverde), el orden defensivo y ofensivo, como apretar en el campo rival, las transiciones en bloque medio de Marcelino… Bastantes cosas», cuenta. Hay anotaciones que siempre lo mantuvieron «muy a mano» porque, ciertamente , nunca he podido ser emprendedor o “estar en este mundo”.
El riesgo del empresario exfutbolista
Sus últimos años como futbolista fueron complicados desde el punto de vista mental. Ibai Gómez admitió públicamente que había perdido la confianza y que tenía medios para comprometerse, una experiencia que, según ella, también le había ayudado en esta nueva etapa. “Puedo estar más cerca de saber lo que dice un juez y la importancia de la cabeza”, afirmó. “Tenemos un cuerpo técnico muy exigente (el acompañante, entre otros, Fernando Amorebieta), pero accesible. Hay una razón por la que tuvo mucho valor como jugador y espero no verme como entrenador: la sinceridad del futbolista. Cuando sostienes a un jugador, tienes los pies contra tu cabeza. Así que lamento no tener que esperar por lo que necesito como futbolista. Es probable que esto suceda. Tenía diez empresarios que les habían ocurrido. Por supuesto, es porque no puedo conservarlo, pero eso es todo, dijo.
Después de los partidos, concluiré mi experiencia dominicana –“nadie me ha transmisido que vaya a seguir”- y la ubicaré en un histórico, el Arena de Getxo, en la Segunda Federación. Pero estos días, en el cónclave olímpico, la larga carrera en los banquillos de este jugador de 34 años vive su cumbre y su momento inesperado. Es sábado, contra España.
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