Catherine Vautrin, Ministra de Trabajo, Sanidad y Solidaridad, debería haber algún motivo para lucirse presentando, el miércoles 10 de abril, al Consejo de Ministros –al mismo tiempo que el proyecto de ley sobre el fin de la vida– un “Estrategia decenal para fortalecer los cuidados paliativos”. El objetivo declarado de este «estratégico» es permitir a cualquier paciente que necesite cuidados paliativos. Para garantizar esto «acceso universal» Para 2034, se prevén 1.100 millones de euros adicionales durante el período. Es decir, un aumento de los créditos del 66% respecto a un gasto anual corriente de 1.600 millones de euros, financiado por la Seguridad Social. Un golpe de suerte que permite al Gobierno comprometerse a crear camas hospitalarias y nuevas estructuras especializadas (20 nuevas unidades de cuidados paliativos de aquí a 2025, 100 equipos móviles de paliativos creados en diez años, etc.).
Un panorama maravilloso que, sin embargo, ignora una realidad: el importante número de puestos vacantes en las estructuras ya existentes. El último estudio se remonta a 2020. Realizado para el Centro Nacional de Cuidados Paliativos y al Final de la Vida, estableció una brecha del 30% entre la plantilla real y el número de puestos a cubrir, recomendado por una circular de 2008. del Ministerio de Sanidad que fija las proporciones de personal en las estructuras de cuidados paliativos. En este sector, el número planificado y financiado de médicos, enfermeras, directivos sanitarios y psicólogos, en comparación con el número de camas, es mayor que en otras ramas de la medicina.
En 2024, ¿cuál será la escasez de cuidadores? “Los datos que aún no hemos sido analizados en su totalidad. Las cifras aún están por perfeccionar, responde a la oficina de MA mí Vautrin. Pero los elementos que hemos mostrado aunque hay tensión demográfica en las diferentes estructuras. » El ministerio cita el hecho de que la circular fue reemplazada por una instrucción publicada en junio de 2023. Que requiere nuevos cálculos.
Un “canal” de formación
Unas pocas encuestas realizadas en varias regiones y departamentos son suficientes para establecer la importancia de los puestos de enfermería vacantes. En Provenza-Alpes-Costa Azul (PACA), la gran mayoría de las unidades de cuidados paliativos funcionan con menos de dos médicos para entre diez y doce camas. La proporción recomendada por el ministerio es de al menos dos a tres médicos. En esta región, la mitad de los equipos móviles de cuidados paliativos no cuentan con médico, aunque deberían contar con al menos uno. En Isla de Francia, uno de cada dos equipos móviles también opera sin médico. Sin embargo, PACA e Ile-de-France no son las regiones en peor situación en términos de prestación de cuidados paliativos.
Te queda el 26,44% de este artículo por leer. El resto está reservado para suscriptores.