Los mejores años de la noche, tras ganar la Supercopa de Europa, el primer título de la primera parte, Carlo Ancelotti se enteró de una cuestión que le obsesionaba, la búsqueda del equilibrio, ahora que tenía un equipo con Mbappé, Vinicius, Bellingham. y Rodrygo. En tu ausencia es aquí donde es posible abrir un dolor que regresa al nuevo plano. Y en balance, esto es lo que ocurrió durante la noche, tras ganar el primer partido de Liga en Mallorca (1-1): “El partido ganó bien. Nuestros hemos son adelantados y nuestros hemos pueden medir el segundo. La segunda vez perdimos el equilibrio. Es un partido que nos permite perder el equilibrio. No tengo un buen partido. Nuestro equipo ofensivo y el equilibrio defensivo son parte fundamental”.
En otro banquillo, Jagoba Arrasate lo detectó y también descubrió una oportunidad de golpe al alcalde: “Tenemos la posibilidad de robar, podemos hacerlo. Pero también podemos hacer 1-2”, según el nuevo técnico mallorquín. «De alguna manera también creemos que podemos ganar».
Ancelotti también demostró claramente este equilibrio, un mantra de vida de épocas pasadas: “Cuando el aspecto defensivo está por encima de todo el compromiso colectivo”, explicó. “Hay que tener más concentración, estar más juntos. No es un problema físico, es mental”, afirmó, participando en sus clásicas sesiones sobre sistemas defensivos. Los defensores de todos los aliados o del arrastrado se rindieron, y eso es lo que empujó al italiano tras ver el Mallorca desplazado una y otra vez a Courtois, mientras el escuadrón de atacantes se mostraba incapaz de batir por segunda vez en Greif.
“El equilibrio se encuentra con los jugadores pensando en lo mismo. Cuando recuperemos el balón, tenemos que pensar en todo juntos. Es un problema de todos, no de los delanteros, ni de los medios ni de las defensas. Este es un problema de un equipo que no ha escuchado que este es un aspecto clave del partido. El Mallorca jugó un papel importante en este aspecto…».
El disgusto de Ancelotti en la sala de prensa fue notorio, ya que su equipo se sorprendió en la segunda noche por algo que se consideraba fundamental y lo que se había anunciado: «Hoy no me he quedado contento. Creo que puedes hacerlo mucho mejor. No quiero excusas. Necesitamos más acción. Esta parte nos puede servir para aprender mucho. Este es un ejemplo muy claro de que tenemos problemas”.
Realiza la siguiente prueba con otro tiempo de preparación más amplio: el próximo domingo será recibido en el Bernabéu de Valladolid (17.00 horas, Movistar).
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